miércoles, 17 de febrero de 2010

Lo que nuestros perros reflejan de nosotros.

Wanda dice que si nos ponemos un poquito observadores podremos conocer mucho sobre nosotros y sobre otras personas a través de nuestros perros. Esto resulta muy evidente si nos ponemos a pensar que hemos establecido mini sociedades en el seno de nuestras familias donde convivimos perros y humanos, bajo códigos de conducta y rituales propios. Además, somos tan gregarios, o sea nos gusta tanto a ambas especies sentirnos aceptados, que esto explica fácil por qué perros y humanos de un mismo grupo, resultan muy parecidos.

Wanda que hoy anda muy zen, nos explica que aquello que llegamos a pensar de nuestro perro es lo que en el fondo pensamos de nosotros mismos, dado que todo aquello que nos rodea se convierte en un espejo de lo que pensamos.

Cuando nuestro perro tiene algún problema severo de conducta éste puede ser causado por una ansiedad localizada en la dinámica familiar. Sin embargo, nuestra postura occidentalizada nos lleva a pensar casi siempre que los problemas del perro son suyos y sólo de él; y lo último que se nos ocurre es reflexionar en qué es lo que nosotros hacemos que puede estar afectando a nuestro amigo canino, y no sólo a él sino al resto de las personas que conviven con nosotros.

Wanda explica que ella y los demás perros y gatos de su humana de compañía de cobrar tarifa por hora de terapia, ya los habría hecho millonarios.

Wanda dice que hoy cuando llegues a casa, de tarea observa un buen rato a tu perro: cómo es la interacción de él con el resto de la familia, sus ansiedades, su capacidad de enfrentar cosas nuevas, su agresividad, su tolerancia, afectividad o su timidez. ¡Seguro te sorprenderás.!

Cómo transportar a nuestro perro.

Wanda a quien le encanta viajar y se ríe de recordar cómo deja el auto de su humana lleeeeno de pelo, nos explica que hay que tener en cuenta ciertas normas para que desplazarse en un vehículo con tu perro no resulte en un accidente.

Si nuestro perro viene suelto dentro del auto es posible que provoque un accidente o bien si tenemos un accidente y éste no va debidamente sujeto puede sufrir lesiones importantes o incluso morir.

Entonces hay dos razones importantes por las cuales debemos de sujetar a nuestro perro en el auto: Una de ellas es nuestra seguridad, evitar que en caso de accidente el perro salga disparado contra nosotros y nos provoque lesiones de mayor gravedad. La otra razón es la seguridad de nuestro perro: lograr que se sienta más seguro y cómodo. Que no se caiga del asiento en caso de un frenado precipitado, que no vaya de un lado a lado en cada curva, y que en caso de accidente, minimicemos en la medida de lo posible el daño que pueda sufrir.

El mercado ofrece una gran cantidad de productos que pueden mejorar los viajes en auto si somos humanos de compañía de un perro. Habrá que analizarlos, ver sus ventajas y sus desventajas.

Una de las mejores opciones para transportar de forma segura a nuestro perro hogareño es utilizando los asientos traseros del auto. Un arnés de seguridad es una buena opción que se adapta a los asientos traseros. Éstos son hechos con materiales resistentes y acolchados para ser utilizado como cinturón de seguridad. Existen también correas que unen el collar habitual de nuestro perro con las clavijas del cinturón, pero son menos efectivas y seguras, ya que no protegen a nuestro querido amigo en caso de una colisión brusca.

Wanda se pone las patas en la cabeza para no ver cada vez que se topan ella y su humana de compañía con un vehículo que lleva en su caja trasera a algún perro suelto. Esto resulta sumamente inseguro para todos: para el perro, para el conductor, otros vehículos y transeúntes. En este caso es conveniente tener un kennel o transportadora para llevar ahí al perro, pero eso sí, sujetando firmemente el kennel con cuerdas o algún arnés para que no salga volando por los aires en caso de algún frenado inesperado.

Finalmente Wanda dice que toda molestia es poca si de verdad nos interesan nuestros perros, y con tanta información disponible, ya no hay excusa para buscarnos peligros innecesarios, para nuestros peros ni para nosotros mismos.

Actividades con tu perro.

Wanda quien está feliz porque estuvo corriendo como la loca detrás de su pelota, nos dice que no hay nada mejor para cualquier perro que un humano de compañía que lleva a cabo actividades con él.

En México apenas inician actividades caninas de recreación y de competencia, en donde en la mayoría son bienvenidos todo tipo de perros, de razas específicas o mestizas. Algunas de estas actividades son para “perros de trabajo”, pero tienen como fin la recreación y convivencia.

Entre las actividades que las personas realizan en Estados Unidos están la agilidad canina, días de campo, obediencia, pastoreo, rastreo, búsqueda y rescate , visitas a hospitales, hiking, freesbe, entre muchos otros. En México los más comunes son la agilidad, y la obediencia canina.

Wanda dice que realizar este tipo de actividades es muy importante porque ayudan a que los perros se integren a sus hogares ya que muchas de estas proveen la estructura que la gente necesita para comunicarse mejor con sus perros.

Además, los perros tienen mejores oportunidades de aprender buenos modales, lo cual hace que para las personas sea más fácil vivir con ellos en vez de de darse por vencidos y tomar la decisión de regalarlos, o abandonarlos. Las actividades con perros ayudan a crear una comunidad interesada en compartir información, sobre cómo aprenden mejor los perros, como evitar problemas de conducta, y como resolverlos de una forma saludable.

Las actividades con perros ofrecen una opción divertida de ejercicio tanto para perros como para sus humanos, y ayudan a mejorar su relación. Un perro que se ejercita es MUCHO menos propenso a tener problemas de conducta.

Wanda dice que en México necesitamos aprender cómo tener diversión con nuestros perros, y así terminar con la terrible imagen del perro que vive solo en el patio o en la azotea. Cuando una persona disfruta a su perro está motivada a trabajar en él y en resolver sus problemas de conducta en vez de darse por vencido con su perro.

Finalmente Wanda nos anima a que busquemos en nuestras ciudades clubs de perros, actividades como caminatas con perros, o clubs de agilidad canina, dice que se sorprenderán de lo que sus perros son capaces de hacer.

Alimento tóxico para perros.

Wanda que descansa después de un paseo por el parque nos dice que hay alimentos que pueden ser tóxicos y peligrosos para los perros.

Este es el caso del chocolate, que en sí mismo no es tóxico para los canes sino la teobromina, un compuesto natural del mismo que causa diferentes reacciones que varían de un animal a otro.

Los perros con problemas de salud, especialmente aquellos que sufren de epilepsia son más susceptibles a la teobromina.

Entre los efectos de la teobromina está la arritmia cardiaca, irritación del tracto gastrointestinal, y en algunos perros puede causar hemorragias internas, las que en algunos casos producen la muerte en el lapso aproximado de un día.

La teobromina se encuentra en cantidades variables según el tipo de chocolate. El chocolate con leche contiene 66 mg por onza, mientras que el chocolate amargo, el chocolate de repostería y la cocoa en polvo contienen cantidades que varían entre 150 y 600 miligramos por onza. La cantidad de chocolate que puede resistir un perro depende de su peso y de otros factores desconocidos. No se han registrado casos de muerte por ingestión de teobromina a niveles inferiores a los 200 mg por kg de peso corporal.

Las nueces en sus diferentes variedades son perjudiciales para los perros por su alto contenido en fósforo que pueden producir cálculos de vesícula.

La cebolla sobretodo cruda es causante de anemia hemolítica en los perros y dar grandes cantidades de hígado puede provocar un exceso de vitamina A, causándoles afecciones en los músculos y huesos.

Dar comida de gato a nuestro perro puede causarle problemas por su alto contenido de proteína y grasas.

Wanda que hace un par de meses se comió 6 donas cubiertas de chocolate se ríe un poco, y sólo le queda recordarles que pongan fuera del alcance de sus perros, estas delicias que pueden resultarles muy peligrosas.

La obesidad en los perros.

Wanda que últimamente no ha hecho tanto ejercicio nos dice que si no se realiza un control adecuado de la dieta de nuestro perro y éste además lleva una vida sedentaria, correrá el riesgo de volverse obeso, con los riesgos que esto implica.

Un perro obeso es propenso a desórdenes físicos tales como problemas cardiacos, de respiración, desórdenes digestivos, y a nivel óseo, ligamentos, articulaciones, puede llegar a una artritis degenerativa.

Mientras que el cachorro tiene un gran desarrollo y rápido crecimiento así como un enorme gasto de nutrientes, el perro adulto ha llegado a su tamaño normal y el exceso de nutrientes que no son aprovechados por el organismo comenzarán a acumularse en forma de grasas que se manifiestan como obesidad. Hay razas más propensas a la obesidad que otras como el Collie y otras más hiperactivas que tienden a ser delgadas como el Setter.

Wanda dice que si la actividad de nuestro perro disminuye, el consumo de alimentos deberá ser ajustado para prevenir la obesidad y esto lo logramos evitando darle comida de la mesa, impidiendo dietas ricas en grasas, así como reduciendo la ración de su consumo total según el consejo de su médico veterinario.

El ejercicio moderado para un perro adulto debe ser parte del programa de pérdida de peso.

Para saber si nuestro perro está obeso se palpan sus costillas, y éstas deben de sentirse y debe haber una cantidad moderada de grasa sobre ellas, pero las costillas se deben diferenciar bien a la palpación. Si se observan las costillas a simple vista, el animal es demasiado delgado, si no se pueden sentir las costillas del animal, está en sobrepeso.

La obesidad puede favorecer las siguientes patologías:

* Diabetes mellitus
*
Enfermedades hepáticas
* Alteraciones cardiocirculatorias
* Alteraciones
articulares
* Mayor susceptibilidad a infecciones
* Alteraciones dermatológicas
* Dificultad respiratoria
* Predisposición al golpe de calor
* Trastornos reproductivos
* Mayor riesgo anestésico-quirúrgico
*
Constipación
* Problemas visuales

Wanda dice que un programa especial para perros con ciertos problemas de peso, debe ser sugerido por su Médico Veterinario.

El cuidado de los dientes de nuestros perros.

Wanda que se acomoda en su mullida camita en una tarde fresca nos explica que los humanos de compañía no debemos dejar pasar el cuidado de las piezas dentales de nuestros perros. Ya que al cuidar los dientes de nuestros buenos amigos caninos, estamos previniendo enfermedades que pueden ser de alto riesgo para ellos.

La dentadura del perro adulto está compuesta por 42 piezas, y casi todas las razas poseen o deben poseer un ajuste perfecto de los dientes caninos para que la boca cierre de forma hermética. A este tipo de dentadura se le denomina “cierre de tijera”.

Algunas razas pueden tener como características específicas y no defectuosas el avance o retroceso de la mandíbula superior o inferior. Tenemos el ejemplo del bóxer cuya mandíbula prógnata, es considerada una característica racial que por otra parte faculta a estos perros para la mordedura de presa, que hace que sin soltar bocado, el perro vaya ganando terreno sobre la superficie o volumen de la presa atrapada.

Los perros cambian de dentadura juvenil, llamada "de leche", compuesta por menos piezas, entre los tres o seis meses de edad, presentando, generalmente, todas las piezas a los siete u ocho meses. Los dientes caducos hacen erupción y si nos podemos imaginar lo molesto que resulta esto podremos deducir el por qué nuestro cachorro querrá morder cuanta superficie u objeto se encuentre con tal de que le alivien tal molestia.

Wanda dice que debemos de conservar los dientes de nuestros perros libres de sarro, porque la acumulación del mismo produce la aparición del mal aliento. Las caries no son muy frecuentes en los perros porque para ellos son relativamente raras las dietas ricas en azúcares, sin embargo veterinarios especialistas en odontología han notado un aumento considerable en la incidencia de caries entre los perros , debido al obsequio de dulces. Para evitar las caries hay que alimentarlos con una dieta adecuada para ellos y darles solamente golosinas elaboradas para perros.

Wanda que tiene unos dientes muy blancos nos dice que el mantenimiento de la blancura, salud y dureza de los dientes de nuestros perros podría en la mayoría de los casos efectuarse de manera natural con una alimentación correcta, tanto en textura como en composición alimentaria. El retirar el sarro acumulado es una operación que siempre debe ejecutar el Médico veterinario y el cepillado de los dientes de nuestros perros sólo es necesario cuando éstos no se ven completamente blancos. Existen cepillos y pastas especiales para perros que se aplican dependiendo de la gravedad del problema pero eso sí, Wanda nos advierte que ante todo hay que consultar con un médico veterinario para que diagnostique el problema.